Estimados docentes: En 1974 se estrenó una película que muchas personas, jóvenes en esos años, quizás recuerden por el impacto que causó. Se llamaba Terremoto (Earthquake, Mark Robson) y era protagonizada por Charlton Heston, conocido actor por sus papeles de Ben Hur y Moisés, en esas películas que todos vemos, hasta ahora, cada Semana Santa.

Hay una escena en esa película que refleja una de esas cosas que hoy son inconcebibles en un mundo lleno de celulares inteligentes, conexiones inalámbricas y redes sociales. Minutos después del feroz terremoto que destruye la ciudad de Los Angeles (EE.UU.), donde está ambientado el film, Stewart Graff, el personaje que encarna Heston, busca desesperadamente cómo comunicarse con su familia y amigos. Recorre, entre escombros, cabinas telefónicas aplastadas por postes y pesados trozos de concreto. Ingresa a las oficinas y descubre, espantado, que los teléfonos no funcionan. No tiene como comunicarse con absolutamente nadie. Hoy, ante un desastre natural o accidente, lo primero que hacemos es meter la mano al bolsillo y hacer una llamada, mandar un mensaje de texto, pasar una foto.

¿Cómo era el mundo, nuestro mundo, hace treinta o cuarenta años? En lugar de correos electrónicos, escribíamos cartas, a mano para que sea más personal. Pero si era una cosa protocolar, formal o fría, a máquina. Nos íbamos a la oficina de correos y dejábamos un sobre, con estampillas, si era al extranjero. Y debíamos esperar semanas a que la carta sea recibida y leída por nuestro/a interlocutor. Hoy, si tengo una novia en China o en Italia, escribo el mensaje, hago click en “Enviar” y si la persona está conectada al mismo tiempo que yo, será cuestión de segundos para que pueda leer y, si tengo suerte, recibir una respuesta inmediata.

Esa inmediatez a la que nos hemos acostumbrado como colectivo social, debido a los usos y herramientas tecnológicas, tiene sus pros y sus contras. Un mundo sin internet hoy sería inconcebible, pero no porque no pudiésemos cumplir nuestras tareas y actividades sino por la locura masiva, la pandemia de histeria que se desataría, en especial en los más jóvenes, si les falta el teléfono más de cinco horas, si la internet desaparece una semana. Los procesos eran más lentos y las conversaciones, más largas. Pasábamos más tiempo en familia y si alguien quería vernos, tenía que esperar.

¿Podríamos vivir en un mundo sin tecnología nuevamente? ¿Qué opinan, colegas?

EL LINK

https://pandorafms.com/blog/es/vivir-sin-internet/

EL DATO

Y tú, ¿qué hacías antes de Internet?

  • Escribir cartas, leer el periódico, mandar SMS dignos de un buen criptógrafo, pedirle recetas a la abuela.
  • ¿Alguna vez te has preguntado por qué tus padres no pueden entender por qué olvidarte el teléfono en casa es tan importante?
  • Bueno, es difícil imaginar un mundo sin redes sociales o Google, actualmente, pero cuando eran adolescentes, Internet no existía.
  • ¿Te imaginas un mundo sin Instagram, Twitter o Facebook, donde cada información importante que pudieras necesitar no estaba al alcance de tu mano?
  • Nuestros padres vivían en ese mundo, y hoy lo repasaremos. ¿Recuerdas lo que hacíamos antes de la llegada de la red Internet?

Fuente: Muy Interesante.es

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  • La vida, antes seria con una comunicación
    limitada y no habria acceso a las noticias, tan fácilmente, utilizarían cartas, telegrama
    s, u otros medios, ya no estarian al alcance
    de todos y se regresaría a las épocas en las q’ la sociedad tenía medios de comunicació
    n, mucho más lentos y difíciles, ahora, gracia
    s, a Dios tenemos la rápides del Internet…

  • La vida, antes seria con una comunicación
    limitada y no habria acceso a las noticias tan fácilmente, utilizarian cartas y telegra
    mas u otros medios, ya no estarian al alcan
    ce de todos y se regresarian a las épocas en
    las q’ la sociedad tenian medios de comuni
    cación mucho más lentos y difíciles, ahora
    gracias a Dios, tenemos la rapidez de Inter
    net.

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