Estimados docentes: Nos acercamos al anunciado retorno a las clases presenciales en el Perú. Una situación que también se ha producido ya en otros países de la región y, a juzgar por las noticias, tendrá más de un tropiezo debido a que la crisis del COVID-19 aun no deja de amenazar a nuestras sociedades. Las campañas de vacunación a niños y adolescentes ofrecen un halo de esperanza pero la aparición potencial de nuevas cepas del virus y ciertos rebrotes de contagios no nos permite bajar la guardia del todo.
La educación en pandemia depende de la tecnología. Es verdad que maestros y padres de familia están jugando un papel de gran importancia en el desarrollo de las sesiones de clases y la formación educativa de sus alumnos e hijos pero, básicamente, es nuestra obligación aceptar que gran parte del proceso de enseñanza-aprendizaje del mundo en pandemia ha sido caracterizado por la autogestión. Los estudiantes aprenden, de forma directa o indirecta, todos los días, a través de la relación íntima, personal y permanente que tienen con sus aparatos: redes sociales, teléfonos inteligentes, laptops, videojuegos. De todas estas herramientas extraen las nociones básicas de interacción social, interés por la información, capacidades para resolver problemas, etc.
Sin la tecnología adecuada a disposición, no existe ningún proyecto de educación remota que logre siquiera un mínimo de sus objetivos, los mismos que no tienen las mismas características que tenían los de la educación presencial. Por ello, el camino hacia un sistema educativo híbrido, que combine lo presencial con lo virtual, es más difícil de lo que parece, y requiere del esfuerzo de todos nosotros para llevarlo adelante de la mejor forma posible.
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EL DATO
- Un ejemplo de las impredecibles adversidades que surgieron a partir del nuevo COVID-19, fue el cierre de escuelas en la región latinoamericana. Este evento impactó la formación de más de 137 millones de niños y adolescentes, según datos de UNICEF, desde el inicio de la pandemia.
- Es importante promover iniciativas que aseguren que los estudiantes tengan un camino exitoso, ya sea en la universidad, en estudios de posgrado o en el mercado laboral. Para apoyar esto, los docentes son actores clave y por eso tienen la responsabilidad de estar al día con las nuevas tecnologías y software.
- La educación es cambiante y demuestra que, incluso en situaciones adversas, se acopla al escenario y lo convierte en una oportunidad. En tiempos de pandemia, la tecnología es la clave que actúa como democracia para la educación, llevando información a los hogares y superando las barreras físicas que nos impuso el COVID-19.
Fuente: Esemanal.mx
El Covid 19,ha afectado en la educacio’n,
dando lugar al cierre masivo de las activida
des presenciales en ma’s de 190 pai’ses, con el fin de evitar el virus y mitigar su im
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