Estimados docentes: Puede parecer fuera de lugar tratándose de un contexto educativo ubicado en el Nivel Primaria (niños entre 6 y 11 años aproximadamente), sin embargo, las nociones básicas de la democracia y la importancia de la opinión de los alumnos, como preparación para su desenvolvimiento en el futuro como ciudadanos activos, es de suma relevancia en esta etapa de su formación integral.
El sistema electoral en países como los nuestros, que recuperaron sus democracias tras diversos períodos de oscurantismo militar, dictaduras políticas o simple anarquía en tiempos más antiguos, es la base de lo que en política social se conoce como la soberanía popular. Hablamos de que cada colectivo social –y las aulas o clases (así sean online) con grupos de alumnos que pueden ser de 5 o 50 individuos, es un colectivo social- necesita aprender a respetar las opiniones de los demás, de los otros. También es útil aprender la importancia de respetar los acuerdos tomados por mayoría, aun cuando la minoría no esté muy de acuerdo o incluso si está abiertamente en contra del mismo.
El mundo adulto ha acostumbrado a los más jóvenes a creer que esto aun no entra en sus áreas de interés, que las elecciones y los debates acerca de política y democracia son “cosas de grandes”. Esa es la principal causa de que las nuevas generaciones, a las que se distrae permanentemente con otras cosas, arriben a la mayoría de edad sin mucha capacidad para entender los procesos sociales y sus consecuencias. Aun cuando los recientes acontecimientos en el Perú –las marchas de noviembre- nos mostraron que hay una enorme masa juvenil que sí ha desarrollado el pensamiento crítico y la conciencia de su futuro, además del rol que juegan en la definición de quien gobierna o no el camino hacia ese futuro, hay una masa aun más grande que está alejada, o mejor dicho, que es alejada a propósito, de esa toma de conciencia y responsabilidad cívica.
Por eso son importantes los cursos de civismo, ciudadanía, personal social y pensamiento crítico.
EL LINK
EL DATO
- Es muy importante atraer a los potenciales electores mientras son jóvenes. La educación electoral para niños es concebida en muchas partes del mundo como una herramienta útil para incrementar la participación en los procesos democráticos y electorales.
- La educación electoral para niños y jóvenes usualmente apunta al logro de dos objetivos: Socializar a los niños para que se vuelvan ciudadanos y electores informados y comprometidos cuando cumplan la mayoría de edad.
- Provocar efectos positivos en la participación electoral de sus padres y familiares a medida que observan que los niños participan en programas de educación electoral.
- Existen muchos ejemplos de iniciativas de educación electoral que se pueden encontrar en diferentes partes del mundo. Aunque estas iniciativas son todavía modestas en el mundo árabe, ya existen algunos ejemplos incluso ahí. Los organismos gubernamentales, los organismos electorales, los partidos políticos y las ONG suelen ser los principales promotores de programas de educación cívica.
- Uno de los tipos más populares de iniciativas son las elecciones escolares y las elecciones simuladas, que involucran a los niños en elecciones que en buena medida son similares a las elecciones reales que se llevan a cabo en el país. Esto se hace organizando elecciones paralelas a las nacionales, votando por consejos escolares o por temas que son relevantes para los propios niños. (Ver el ejemplo de Gotemburgo, Suecia).
- El propósito de estas elecciones es, además de provocar interés y comprensión de los procesos políticos, introducir a los niños al acto real de votar y hacerlo de manera divertida y simple. Con frecuencia estas elecciones son realizadas justo antes o de manera paralela a las elecciones nacionales.
Fuente: ACE Project.org
La educación electoral, se debe al logro de
dos objetivos: socializar a nuestros estu
diantes para q’ se vuelvan ciudadanos y elec
tores informados y comprometidos, cuando
cumplan la mayoría de edad, o sea q’ todos
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