Estimados docentes: De un tiempo a esta parte, las plataformas de streaming y estudios de televisión más conocidos de los Estados Unidos han establecido un estilo de películas navideñas, orientado al amor de pareja en primer lugar, dejando la unión familiar y las relaciones amicales como componentes secundarios a la historia principal, casi siempre enfocada en el surgimiento o la recomposición de una relación romántica, gracias a la influencia del espíritu navideño. Títulos clásicos del cine romántico navideño son, por ejemplo, Serendipity (2001) o The holiday (2006).

Esta forma de hacer cine con el tema de la Navidad como hilo conductor tiene mucho arraigo y aceptación en el público en general, quienes consumen estas historias con ilusión y deseos de escapar de una situación personal o familiar difícil, o para desconectarse de la realidad de sus países con contenidos que sean amables, esperanzadores, de ánimo positivo y finales felices que iluminen un poco nuestras vidas cotidianas. En ese sentido, estas películas cumplen el mismo rol que títulos clásicos ya no tan frecuentes en las programaciones navideñas, más enfocados en la compasión, la magia de la Navidad -presentes también en las actuales, pero siempre como elementos que rodean a la historia romántica que figura en primer plano- o las que juegan con situaciones irreales como las animaciones de Tim Burton.

Ver cine navideño es también un motivo para pasar estas fechas en familia o en pareja, distanciarnos de las barbaridades que normalmente vemos en las series violentas, atemorizantes o tensas que solemos ver en maratones en nuestro proveedor preferido de streaming -Netflix, Disney, otros- o en los repetitivos noticieros que solo anuncian crisis, casos de corrupción, actos delincuenciales y demás realidades nocivas para el estado de ánimo.

En este post, algunas recomendaciones de películas navideñas algo más clásicas, basadas en narraciones de escritores del pasado como Charles Dickens, historias cómicas de los años noventa o fantasías de personajes animados que inspiraron nuestra infancia.  

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EL DATO

  • Este sábado 24 por la noche estaremos todos reunidos en torno a la Cena de Navidad, celebrando el nacimiento de Jesucristo, el personaje más influyente de la historia de la Humanidad. Es bueno decirles a nuestros alumnos que, si bien es cierto la modernidad busca reducirlo todo a la compra e intercambio de regalos, es fundamentalmente una celebración que nos invita a reflexionar sobre los valores familiares.
  • Entre esos valores destacan la unión, la solidaridad y la satisfacción de vivir sin hacerle daño a los demás, respetando y ayudando al prójimo. Y el cine suele ser una gran herramienta para aprender y reflexionar.
  • Para el día siguiente, domingo 25, queremos recomendarte algunas películas navideñas que, desde la reflexión profunda hasta la comedia, desde lo romántico hasta lo fantasioso, resultan ideales para ver aspectos de la Navidad que trascienden lo religioso para adentrarse en la complejidad de las relaciones humanas y su necesidad de convivir pacíficamente.

Fuente: Blog Derrama Magisterial

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