Estimados docentes: ¿Cuántas veces nos hemos reído a carcajadas con las respuestas que el Chavo del Ocho y sus compañeros le dan al Profesor Jirafales en el salón de clases? A veces inesperadas, a veces opuestas a lo que uno considera «correcto», estas respuestas nos hacen reír pero también nos hacen pensar en la intensa imaginación y la diversidad que tiene el pensamiento infantil. En muchas ocasiones, estas respuestas sorprendentes, que quizás reciban una calificación negativa, pueden enseñarnos más sobre la personalidad del alumno. O quizás darnos un matiz, una mirada diferente a la que, como adultos y educadores, ya damos por sentada como única realidad.
A ello apunta el especialista español José Antonio Fernández Bravo en esta conferencia, parte de las que difunde El País en alianza con el BBVA. Aprender de los niños que tenemos a cargo es también una de las tareas que debemos realizar como orientadores durante el proceso enseñanza-aprendizaje. Aun cuando nos parezca una respuesta graciosa, inapropiada, esa mirada infantil puede ser reflejo de un mundo interior muy rico, que nos servirá para llevar la clase en direcciones que quizás no hayan sido las que planificamos antes de pasar la puerta del aula, pero que pueden ser tan o más positivas en términos de aprendizaje integral.
EL LINK
https://www.educo.org/Blog/lo-mas-valioso-de-ser-docente-es-aprender-de-los-ninos-y-las-ninas
EL DATO
Existen muchísimas cosas que podemos aprender de los niños, de su actitud ante la vida, la forma de enfrentarse a problemas, su decisión… Aún no hemos entendido que realmente no tenemos que esforzarnos en aprender a ser creativos e innovadores, sino que únicamente debemos recordarlo.
- Pon el corazón en lo que hagas. Da igual, que estés jugando, corriendo o montando un puzzle. En ese momento es lo único importante, así que disfrútalo con todo tu ser, energía y pasión.
- Deja atrás tus prejuicios. Si olvidas tus ideas preconcebidas podrás descubrir que el mundo es mucho más fácil y atractivo, y que está lleno de posibilidades.
- Tienes que divertirte. Aburrirse es aburrido. Si no te diviertes, es que algo estás haciendo mal. Aunque sea con un palo y una piedra, siempre es posible pasarlo bien. La clave está en tu imaginación.
- Expresa tus emociones. Tanto si eres absolutamente feliz como si estás triste, déjalo salir. Te sentirás genial, y aprenderás a reconocer y aceptar tus emociones. Si las dejas dentro, acabarás por no ser feliz.
- Sé honesto. La verdad es tu mejor aliada, así que siempre di lo que sientes o piensas. Aunque a veces puede ser duro escucharlo, la gente confiará completamente en ti… así que míralos a los ojos sin pestañear y dilo.
- Aprender cosas nuevas es genial. Todo conocimiento es una nueva pieza a utilizar al resolver problemas y divertirse, no importa sobre qué sea. Cuantas más cosas sabes, más posibilidades hay.
- Pregunta lo que no sabes, y si lo necesitas, pide ayuda. Es normal que no lo sepas todo, y la vergüenza a preguntar es una tontería que sólo te hace permanecer ignorante. Si algo no te sale, levanta la cabeza y pide ayuda. ¿Qué es lo peor que te puede pasar? Que te quedes como estas
- La vida es más fácil de lo que crees. Toda esa obsesión por lo que sucederá en el futuro, o por lo que pasó hace tiempo no sirve de nada. Vive en el ahora, disfruta de cada momento y apóyate en las que personas que te quieren.
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