Estimados docentes: Cada vez son más preocupantes los casos de iniciación temprana en el consumo de alcohol y drogas de nuestros estudiantes, se trata de una realidad difícil del aceptar pero a la que no podemos darle la espalda porque de nuestras acciones de refuerzo, junto a los padres de familia, depende la vida y el futuro de los niños y adolescentes de nuestra comunidad.
Las cifras son alarmantes, niños de once años que ya han tenido alguna experiencia con el licor y adolescentes de 13 que declaran consumir alcohol o drogas como parte de su rutina semanal de socialización y distracción con los amigos. Se trata de casos que no discriminan por razones de sexo, lo hacen los varones y las mujeres, ni tampoco por grupo social puesto que esta realidad se da tanto en los medios económicamente acomodados como en los más deprimidos.
En realidad el problema es muy amplio y el primer ámbito en el que hay que atacarlo es el hogar, pero la escuela juega un rol muy importante también porque es el lugar de reunión, socialización y desarrollo de diversos aspectos de la personalidad de los estudiantes, por lo tanto debe acometer esta clase de situaciones con la eficiencia y capacidades para aportar bienestar y mejoras.
Nuestras escuelas son el blanco perfecto para quienes comercializan con estupefacientes, gran cantidad de estudiantes afirma que tanto el alcohol como las drogas se venden en los alrededores de sus colegios y además se infiltran entre ellos mediante sus compañeros.
Debemos estar atentos a las señales de peligro en este tema, hay alarmas como las conductas violentas, el acoso escolar, el rendimiento deficiente, la conducta problemática, entre tantos otros que no podemos dejar pasar por alto. Hablemos con nuestros alumnos, preguntemos, investiguemos, apoyemos programas para que se entretengan con actividades libres de vicios. Nosotros somos sus maestros, sus guías, sus ejemplos, no los defraudemos.
En el siguiente enlace encontrarán un extenso documento del Ministerio de Educación Argentino, Educar y Unicef sobre la prevención del consumo problemático de drogas entre los estudiantes.
EL LINK:
http://files.unicef.org/argentina/spanish/Edu_ModulosESI.pdf
EL DATO:
Algunas acciones que el profesorado desarrollar para prevenir el uso de drogas entre sus alumnos:
• Despertar el interés del alumnado en actividades dentro y fuera del aula.
• Prestar atención, aprobar y reforzar el trabajo bien hecho y el comportamiento adaptado.
• Proponer a los alumnos metas adecuadas a su edad y a sus capacidades.
• Dar más importancia a lo que son capaces de conseguir que a los errores que cometen.
• Hacer elogios que se ajusten a la realidad y reconocer sus éxitos aunque sean pequeños.
• Valorar no sólo el trabajo académico sino sus capacidades extracurriculares.
• Aceptarlos como son y evitar las comparaciones con sus compañeros.
• Enseñarles a asumir sus fracasos, haciéndoles ver que de los errores se aprenden cosas.
• Procurar que respeten las normas y los acuerdos, sin ceder ante sus presiones.
• Enseñarles que muchas veces las cosas que deseamos no podemos obtenerlas inmediatamente.
• Orientarlos para que no sientan como propios los fracasos por causas ajenas.
• No hacer públicos los malos resultados que tengan sino comentarlos con ellos en privado.
• Reforzar sus manifestaciones de autonomía.
• No tomar decisiones que les corresponden a ellos.
• Dar normas claras, sencillas y empleando el tiempo necesario para que entiendan lo que se les pide.
• Crear un clima de confianza en el que los escolares se sientan libres para expresar sus ideas.
• Fomentar su intervención en actividades que requieran el uso de la imaginación y la creatividad.
• Admitir sus manifestaciones críticas, cuando éstas sean acertadas.
• Alentar a que defiendan sus opiniones, escuchen a los otros, entiendan y sean tolerantes.
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