Piano y latin-jazz: Un documental sobre Michel Camilo

Estimados docentes: La música es el lenguaje universal, dicen desde hace muchos años. Y es cierto, totalmente cierto. Sin embargo, ¿cuántos lenguajes tiene la música para nosotros? Una variedad que puede calcularse hasta el infinito. Desde nuestros folklores nacionales hasta los géneros de moda, desde la clásica versión de la música ancestral hasta variedades desconocidas. Las músicas de distintos países, ritmos y épocas nos presentan universos completos de aprendizajes múltiples que, bien aprovechados, abren nuestras mentes a conocimientos que trascienden el hecho de una canción para escuchar.

Este documental es una muestra de ello. Podemos aprender varias cosas viendo este film acerca del pianista Michel Camilo, nacido en República Dominicana. Sobre el piano, por ejemplo, uno de los instrumentos musicales más populares y expresivos de la historia del arte musical. O sobre el jazz latino, esa mezcla de sensibilidades que nació del mestizaje entre la música negra norteamericana y el folklore de percusiones que llegó de Cuba y el resto de países caribeños. O de cómo este talentoso pianista dominicano se interesó en la música hasta convertirse en un famoso, aunque no masivo, intérprete aplaudido y admirado por cientos de miles de personas.

Escuchar música relaja, emociona, educa y entretiene. Por eso es una de las actividades que más personas realizan en esta cuarentena y aislamiento social. Y si de escuchar música además aprendemos cosas nuevas, cuanto mejor. ¿Verdad, colegas?  

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EL DATO

Curiosidades del piano

• Su origen: El antecesor más antiguo conocido del piano es la cítara, un instrumento de la Edad de Bronce originario de África y el sudeste de Asia. Se componía de un conjunto de cuerdas dispuestas sobre una tabla y que se hacían vibrar con las uñas o con algún objeto punzante. En la Edad Media se creó el monocordio. El monocordio es un instrumento cóncavo y alargado con una sola cuerda que se solía percutir con el cálamo de una pluma de ave. El pariente más próximo en el tiempo es el clavicordio (s. XIV) que, como el piano, respondía a la fuerza del ataque, aunque de forma débil. A partir de este mecanismo se creó el piano moderno.
• El inventor: Bartolomeo Cristofori construyó a finales del siglo XVII un instrumento similar al clavicordio con una significativa evolución. Al hacer vibrar las cuerdas sobre una pieza de madera con forma de martillo se conseguía un sonido más dulce y sostenido que, además, se podía regular en volumen y tono, dependiendo de la fuerza con que se pulsaran las teclas.
• La etimología de “piano”: La palabra piano es la evolución del nombre con el que Cristofori bautizó a su creación: clavicémbalo col piano e forte, que se traduciría al castellano como “clavecín con sonido suave y fuerte”. El término responde a la capacidad del instrumento para producir sonidos fuertes (forte) y suaves (piano). Esta característica era la que lo diferenciaba de sus predecesores. Posteriormente, se abrevió su nombre a pianoforte y más tarde se acortó a “piano”, tal como lo conocemos en la actualidad.
• Los principales compositores para piano: La época de mayor apogeo para la música para piano fue el periodo que comprende desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta finales del siglo XIX. El mayor legado de composiciones para piano a partir del periodo clásico lo aportaron entre otros, compositores como Haydn, Mozart, Beethoven, Schubert, Chopin, Mendelssohn, Schumann, Brahms o Liszt.
• Las notas del piano: Prácticamente todos los pianos modernos tienen 88 teclas (36 negras y 52 blancas) pero esto no fue siempre así. La mayoría de los pianos construidos entre fines del siglo XIX y la primera década del siglo XX tenían 85 notas. Solo a partir de la segunda década del siglo pasado comenzaron a construirse con 88 notas. Sin embargo, la casa de pianos Steinway & Sons ya construía pianos de 88 notas a finales del siglo XIX.

Fuente: Hinves.com