Cajón: Un instrumento peruano de percusión

Estimados docentes: ¿Quién no ha disfrutado del ritmo de un alegre festejo, una contagiosa zamacueca, un sensual landó? En cada uno de estos estilos musicales afroperuanos brilla el cajón, con su sonido retumbante y natural, proveniente de las manos que repiquetean suave madera, como dice la letra de una conocida canción de nuestro acervo musical folklórico.

Como docentes que somos, no debemos perder nunca el impulso por inculcar en nuestros alumnos el conocimiento, valoración y cariño por las expresiones artísticas de nuestra tierra, como punto de partida para conocer, apreciar y querer también la cultura de otros países, igual de estimables y que son fuentes de información sobre cada uno de sus orígenes. A través de la música entendemos mejor quiénes somos nosotros y nuestros vecinos.

Asimismo, aprender a conocer el mundo de la percusión y, en particular, siendo peruanos, del cajón y sus derivados, nos conecta con nuestro ser originario, esa riqueza multicultural que nos acompaña desde hace siglos. El cajón, su toque y sonido, puede ofrecernos más que un motivo para bailar. La conexión con el latido de nuestros corazones, el orden y el sentido del tiempo, además de la concentración en el ritmo humano y orgánico. Tocar un instrumento de percusión nos alivia de preocupaciones y libera el estrés.

Cada cierto tiempo, podemos innovar nuestras clases llevando un cajón y haciendo que nuestros alumnos lo toquen y se diviertan, se suelten y jueguen con el poder del ritmo.

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EL DATO

Beneficios de tocar instrumentos de percusión:

• Crear y sincronizar un ritmo permite liberar las preocupaciones y se convierte en una salida de las emociones negativas.
• Tocar un instrumento de percusión tiene la ventaja para impactar positivamente la salud mental, física y emocional en el día a día. 
• Los cajones, por ejemplo, ofrecen grandes oportunidades al tocarlo y tampoco se necesita muchísimo dinero para aprender a interpretarlos.  
• Los percusionistas tienen cerebros fundamentalmente diferentes que el resto, porque es una experiencia de aprendizaje constante que aumenta el desarrollo del cerebro, mejora la memoria verbal y fortalece la capacidad de lectura, que da como resultado procesar y absorber mejor la información que se lee.
• Aprender a tocar percusión no sólo mejora la capacidad de escuchar los detalles, sino que los hace más hábiles incluso para sus conversaciones diarias y no sólo para crear ritmos. En ese sentido, su oficio de músico influye positivamente en sus habilidades sociales e intelectuales.
• Tocar instrumentos de percusión puede aliviar el dolor e impulsar las emociones positivas.