Estimados docentes: Este fin de semana comienza el Mundial de Fútbol Catar 2022. Y una de las informaciones que más están dando la vuelta al mundo es el choque cultural y social que se generará cuando miles de turistas de continentes totalmente más relajados que este país del sudeste asiático -Sudamérica, Europa, Norteamérica- lleguen con todas aquellas costumbres que consideramos “normales” a superpoblar calles, plazas, aeropuertos, lobbies de hoteles, restaurantes y estadios cataríes.
Como (casi) todos sabemos, Catar es un país mayoritariamente islámico y, a pesar de que su economía de alto perfil está en contacto con el mundo occidental de forma constante, mantiene un férreo ordenamiento social que, en muchos aspectos, colisiona de manera frontal y opuesta a conductas que, en el hemisferio occidental, son absolutamente permitidas. Por ejemplo, las mujeres no pueden caminar con brazos y piernas al descubierto, por mucho calor que haya. Los transeúntes no pueden caminar por las calles con una lata de cerveza. Las parejas no pueden ejecutar “demostraciones de cariño” en público. Hablamos de que no pueden besarse, abrazarse, ni siquiera ir tomados de la mano.
¿Cómo se desarrollará el Mundial de Catar en estas condiciones? Aun no se sabe pero, lo más predecible es que las autoridades deban flexibilizar, durante el tiempo que dure la visita de los fanáticos del fútbol del planeta entero- esta clase de restricciones que además tienen su base en fuertes convicciones religiosas. ¿Qué pensarán de todo esto las poblaciones más antiguas de Catar, los ancianos? Porque quizás las juventudes sean mucho más permeables pero, una señora de 65 años, qué afectación padecerá al ver los cánticos sazonados con cerveza, los chicos y chicas abrazándose en ropa de verano porque su equipo hizo un gol. Fuera de los estadios se jugará, definitivamente, un partido aparte, quizás más interesante ¿no creen?
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EL DATO
- Qatar es uno de los estados más avanzados de la comunidad musulmana por su constante contacto con ciudadanos e inversores de países de occidente. Sin embargo, y aunque se rige mediante el derecho romano -al igual que la mayoría de Europa-, la Sharia, es decir la Ley Islámica, tiene lugar en algunos ámbitos de la sociedad.
- Uno de los principales aspectos a considerar es la vestimenta. Resulta necesario destacar que, si bien existen mayores requisitos para con las mujeres, tampoco se permite que los hombres usen ropa que permita ver demasiado la piel a pesar de las altas temperaturas en Qatar.
- El Corán no permite el consumo de estas sustancias y lo sanciona en varios de sus pasajes, por lo que los fieles musulmanes más ortodoxos evitan este tipo de cuestiones. En Qatar está permitido solo en algunos recintos, aunque no en la vía pública o en todos los bares.
Fuente: Ole.com.ar
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