Estimados docentes: Frecuentemente hablamos de “romper paradigmas” en educación. Esta frase se ha convertido en una especie de mantra que busca dar a entender que, quien lo pronuncia, tiene las ideas claras sobre qué conviene hacerse para mejorar nuestro sistema educativo. Sin embargo, romper un paradigma -o romper un modelo, que para tal caso es lo mismo-, si no viene precedido de un estudio exhaustivo y serio de las opciones nuevas que se quieren implementar puede ser un remedio más dañino que la enfermedad.
Por eso cabe que nos preguntemos sin realmente queremos, como educadores, romper los paradigmas educativos que sirvieron de base para nuestra formación profesional o si solo estamos repitiendo lo que una tendencia en el estudio moderno sobre cómo mejorar y modernizar la educación ha impuesto como fórmula. En principio, vivimos en una época -la tecnológica o cibernética- en la cual ya no existen paradigmas fijos, pues los cambios en cada nuevo modelo se incorporan en periodos muy cortos de tiempo. Por ello, más que de una ruptura absoluta con un modelo paradigmático único, la educación actual requiere una comprensión amplia de que ya no es una monolítica forma de hacer las cosas, sino que es un proiceso que permanentemente va mutando, enriqueciéndose.
Es útil conocer entonces de qué hablamos cuando nos referimos a los paradigmas y si estamos seguros de que el solo hecho de “romperlos” es positivo o si en realidad debemos dedicarnos a adaptar sus mejores características al flujo vertiginoso de cambios que las personas y las herramientas nos proponen.
EL LINK
https://www.lifeder.com/tipos-paradigma/
EL DATO
El concepto de paradigma se utiliza comúnmente como sinónimo de “ejemplo” o para hacer referencia en caso de algo que se toma como “modelo”. En principio se tenía en cuenta en el campo, tema, ámbito, entre dos personalidades u otros…, gramatical (para definir su uso en un cierto contexto) y se valoraba desde la retórica (para hacer mención a una parábola o fábula). A partir de la década de 1960, los alcances de la noción se ampliaron y paradigma comenzó a ser un término común en el vocabulario científico y en expresiones etimológicas cuando se hacía necesario hablar de modelos de conocimiento aceptados por las comunidades científicas.
En el sector educativo, la formulación de nuevos paradigmas supone una evolución para lograr el mejoramiento del conocimiento disponible, considerándose como nuevos instrumentos para resolver incógnitas (Luna, 2011).
Paradigmas educativos
Basados en este precepto, dentro de la educación se reconocen varios tipos de paradigmas:
- Conductista
- Constructivista
- Histórico-Social
- Cognitivo
- Cuantitativo
- Cualitativo
- Positivista
- Interpretativo
- Empírico-Analítico
La verdad muy interesante el análisis del significado de paradigma porq 3.ª veces decimos ,Sus paradigmas no puede cambiar y simplemente son ejemplos que vive en personas de experiencia.